El mundo del diseño gráfico ha ido siempre muy paralelo a los movimientos culturales y sociales que se producen en cada período de la historia. En esta serie de artículos haremos un repaso a la evolución de éste desde que comenzó su auge en EEUU y Europa como elemento propagandístico hasta llegar a nuestros días, donde sus aplicaciones son mucho más variadas.
- EL CARTELISMO EN ÉPOCA DE GUERRA
Desde el inicio del S. XX, el Diseño se desarrolló en Europa alejándose de la descripción de artesano. Las creaciones a principios del siglo se centraban en postales, carteles, estampillas o embalajes, en mayor medida.
La Primera Guerra Mundial estableció la importancia del Diseño Gráfico, basándose éste en el desarrollo del cartelismo y los motivos de guerra.
Tras ella, el objeto del diseño se centró en el turismo y la publicidad. Podemos hablar, por ejemplo, del cartelismo polaco, con Stefan Norblin. En esta época todavía no existían medios de comunicación como la radio o la televisión, por eso el diseño de carteles era uno de los medios más eficaces para hacer llegar la información a la población.
Durante esta época fue muy importante el movimiento constructivista y la propaganda comunista que se generó. La revolución rusa de 1917 supuso una nueva era para el país y uno de los cambios más significativos de la historia reciente de la humanidad. “Esta revolución no se limitó a un cambio de gobierno, fue una revolución social, artística, industrial y de los medios de producción”. Llevó consigo un nuevo lenguaje y se producían con fines sociales. Visualmente se basaban en el uso de diagonales y líneas geométricas claras, muy simples y rectas.
La Segunda Guerra Mundial abrió un negocio en el cartel propagandístico. Pues, mientras que muchos sectores como el transporte o los suministros se paralizan durante un conflicto bélico, muchos otros se ponen en marcha, como es el caso de la fabricación de armamento o de la propaganda política. Los países involucrados se dedicaron a difundir todo tipo de mensajes ajustándose a sus necesidades y a las de sus aliados. Como la propaganda nazi asegurando la victoria alemana a cargo del Ministro Joseph Goebbels, pionero en técnicas aún vigentes de marketing publicitarias. “A Geobbels se le atribuye la percepción
negativa de la palabra propaganda hoy en día, haciendo que muchas veces se sustituya por publicidad, de manera completamente incorrecta cuando se refiera a contenido político”.