Cada año, la publicidad navideña llega antes a nuestros hogares a través de campañas televisivas que nos proponen los mejores dulces, juguetes, perfumes e incluso viajes para regalar a nuestros seres queridos. Igualmente, nuestros dispositivos empiezan a recibir multitud de propuestas para las fiestas y las calles se engalanan con espectaculares elementos de iluminación.
El diseño de una estrategia de marketing “navideño” cada vez es más habitual en las empresas que quieren sorprender a sus clientes con originales felicitaciones, regalos de empresa diferentes o eventos especiales, que se alejen de los tópicos…
Aunque los objetivos de estas campañas son claros: potenciar las ventas, fortalecer el reconocimiento de marca y fidelizar, no hay que olvidar que la publicidad tiene muy presente el componente emocional y humano, ya que se trata de unas fiestas familiares, donde prevalecen los sueños, la amistad, en resumidas cuentas, elementos aspiracionales y evocadores.
¿Tienes ya el concepto argumental sobre el que girará tu campaña?
La cuenta atrás ha empezado, tic, tac, tic, tac…..