En anteriores publicaciones, descubrimos cómo una construcción sólida y potente de tu imagen determinará, en gran medida, que tu marca destaque por encima del resto.
Ahora vamos a descubrir los indispensables que deberá cumplir un logotipo.
Esta semana nos centraremos en tres de ellos, así que… ¡permanece atento al próximo post si quieres conseguir una imagen con un gran poder funcional y comunicativo!
Vamos a ello:
- SINGULARIDAD:
Deberá destacar por encima del resto dentro del nicho de mercado al que pertenezca. No deberá confundirse con ningún otro ya sea por el nombre, apariencia, etc.
- COHERENCIA:
Ha de ser un fiel reflejo de los valores y la imagen de la compañía e ir en concordancia con ellos.
- FUNCIONALIDAD SOBRE BELLEZA:
Un logotipo debe ser bonito, sí, pero ante todo tiene que ser simple y práctico.
Debe transmitir solidez, dirigirse con éxito a su público objetivo, reflejar los valores de la empresa a través de su forma, colores y tipografía, tener un grosor adecuado y ser escalable a diferentes tamaños sin perder legibilidad, tener capacidad de adaptación y flexibilidad ante los diferentes soportes y medios, ser reproducible a un solo color y en positivo/negativo, no tener dobles lecturas.
Y después de responder a todo esto con nota, si es bonito, ¡mucho mejor!